COMENTARIOS AL RELATO DE «EL TINTERO DE ORO» DE 02/2022 DE ACUERDO CON LAS PREMISAS DEL SIGUIENTE CARTEL:
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Aquí encontrarás comentarios sobre la actualidad y lo que no es tan actual, lo que tiene cierto interés o lo que ha despertado la curiosidad del autor, algunos relatos y fotos propios y artículos de prensa. Todo sin más pretensión que la de darle salida pública.
Ya echaba de menos un relato desde el punto de vista de los ladrones, casi que escribo uno de corte similar, pero al final me decanté por el otro tan raro que escribí 😊
ResponderEliminarEl tipo de rateros me ha encantado, son de poca monta, aficionadillos de tres al cuarto el susodicho Berto y al idiota del hermano, “el tenor”… la mención al Saltavadillo y su cuñao.
El tono en que ha sido contado es de mofa, casi esperpéntico, no pueden meter más la pata los aficionadillos. La escena con los chinos y la escurridiza china, hilarante.
Los diálogos son perfectos, por el tono coloquial seguidito que se requiere, parece que los escucho hablar
Bueno…¡pues a saber quien se llevó la estrella rosa, si todos los chinos son o nos parecen iguales, poco se sacará en claro.
Al final da penilla de estos dos pringaos
Un relato para su disfrute y sonrisa.
Ya lo tengo entre mis preferidos, lo difícil va a ser elegir entre las buenas propuestas de esta ocasión.
Hola, Isabel. Merece la pena escribir solo para leer tu generoso comentario. Como dices, dos aficionadillos de poca monta que sufren un engao y les birlan la mercancía en sus narices. Las preferencias son mutuas, pero las hacia ti más merecidas. Un abrazo.
EliminarLa entrevista desde el chabolo estupenda con trepidante descripciones cinematográficas (entroncando naturalmente con los excelentes films de cine negro) ¡Un acierto el mote de "Saltavadillos"! Impregnas humor, desapego a la vida próxima a los márgenes de ley y orden, proscritos de lo más amenos, frases divertidísimas [ "Yo vendelte caletas" ] Además hago ejercicio de memoria, porque en tiempos ya lejanos estuve trabajando en un restaurante (perdón, "lestaulante") chino y tú me lo has actualizado (era un lugar muy importante de mi ciudad....¡¡¡pero también repleto de mafia y aspectos lumpen!!!
ResponderEliminar¡¡¡¡¡¡¡Me lo he pasado "pipa" embrujándome en tu tribulación de delincuentes!!!!!!!
Hola, Juan. Lo de los chinos da mucho juego para las historietas, pero parece que, como apuntas, también en la vida real hacen de las suyas. Espero que ninguno si me lee se sienta ofendido, son estereotipos que hay por todas partes. Muchas gracias por tu comentario. Un abrazo.
EliminarHola, Isan. Coincido con Isabel. Has encontrado muy bien el tono y el lenguaje para dar voz a esos raterillos de poca monta y has logrado una historia ágil y divertida. Muy buen relato. Felicidades y mucha suerte.
ResponderEliminarHola, Marta. Me alegro de que te pareciera divertida. Esa era la pretensión. Gracias por comentar. Un abrazo.
EliminarHola Isan, un relato que atrapa desde el inicio. Tiene su mezcla de ironía, desfachatez, humor. Uno no puede mas que sentir algo de simpatía por los protagonistas que resultaron burlados en su intento de robo. Me gustó. Mucha suerte.
ResponderEliminarHola, Ana. Es verdad que las simpatías siempre caen en los perdedores, por lo menos en los cuentos. Gracias por pasar por aquí. Un abrazo.
EliminarHola Isan, parece que entre hurtos y drogas ambos nos hemos metido en el mundo del hampa. Tú conun refinadísimo y exacto humor para la situación.
ResponderEliminarAbrazo
Hol, Juana. Me ha entrado la curiosidad por leer tu relato, pero tardaré un poco en llegar a tu "Carambola" porque llevo un riguroso orden de publicación, pero llegaré. Un abrazo.
EliminarHola Isan, muy bueno tu relato, con algo de humor incluido, en menudo lío se han metido los protagonistas que a pesar de ser delincuentes, resultan simpáticos con su tan mala suerte, muchas suerte, saludos Patricia F.
ResponderEliminarHola, Patricia. Que no falte el humor. Gracias por pasar. Un abrazo.
EliminarHola, Isan. Muy bien contada la historia. Me has atrapado desde el inicio al final. Buen relato.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola, Carmen. Un placer que te haya gustado. Un abrazo
EliminarHola, Isan . Muy buen relato. Me has recordado a algunas de las novelas del gran Donald Westlake que iban sobre atracadores , pero tenían mucho humor . Un relato con unos diálogos muy frescos y que te enganchan. Mucha suerte en el concurso. Saludos.
ResponderEliminarHola, Pedro. No conocía a este escritor. He mirado en Wikipedia y me ha picado la curiosidad, así que leeré algo de él. Gracias por la información y por el comentario. Un abrazo.
EliminarHola, Isan. Con suma pericia conformas un relato dentro de otro relato, contado a golpe de diálogo y con gran acierto. Y es que, como te señalan, has dotado de voz propia a los parlantes, incluso a las imitaciones del propio narrador que hace del enorme elenco de personajes que al final salen en tu historia. De la trama, ¿qué te voy a contar? Que me ha encantado, y no solo por lo bien escrita que está, sino por cómo reduces a esos seudovillanos a víctimas de un cerebro oriental que se valió de su ignorancia para realizar el gran golpe.
ResponderEliminarMagnífico. Me encantó.
Un abrazo y mucha suerte.
Hola, Pepe, con comentarios como los tuyos da gusto. Siempre sacando lo positivo con mis relatos. Ya sabes los chinos con esa mirada están escrutando y pensando, así que parecen el cerebro de la operación. Te agradezco el comentario. Creo que tardaré un poco en conocer tu "diamante", pero llegaré. Un abrazo.
EliminarUna historia atrapante y súper interesante.
ResponderEliminarTe invito a pasar por nuestro blog porque hay un regalito para vos
https://somosartesanosdelapalabra.blogspot.com/2022/02/estamos-de-festejo.html
Hola, Artesan@as, me intriga el regalito, así que veré que qué se trata. Un abrazo.
EliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarMe ha recordado a las películas de "Solo en casa", porque el tipo de villanos son de la misma guisa, torpes e ingenuos, pardillos podríamos decir, casi dan hasta pena. Has logrado escenas muy simpáticas y ese chino con sus salidas a base de frases cortas está la mar de "diveltido". La trama ingeniosa y trabajada, con situaciones que resuelves brillantemente. Me ha gustado también que lo hayas planteado a modo de entrevista desde la cárcel. Muy buen trabajo, Isan. Un abrazo!
ResponderEliminarHola, Jorge. Chapucillas de estos hay muchos no solo en la literatura, la vida real está llena. Me alegra que te haya gustado. Un abrazo.
EliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarHola Isan, qué bueno, la descripción del robo y los rateros son la pera, los diálogos le dan un ritmo que te los imaginas ahí, pringándose, en el robo para luego salir tan mal "paraos". Y sin saber donde fue a parar el diamante. Unos pardillos, que se la han "colao". El chino, seguro que ha sido el chino, jeje. Qué buen rato. Un abrazo
ResponderEliminarHola, Eme. No vas desencaminada con el chino, son muy sagaces estos orientales. Te agradezco el comentario. Un abrazo.
EliminarHola, Isan. Vaya panda de atracadores de pacotilla están estos hecho. A Berto y a sus compinches sí que los han engañado como a un chino. Je, je, je.
ResponderEliminarUn relato realmente divertido, con unos diálogos buen amenos y divertidos.
Mucha suerte en el concurso.
Un abrazo.
Hola, Bruno. Buen apunte eso de engañados como a un chino. Si te pareció divertido. misión cumplida. Un abrazo.
EliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarMenudos rateros de poca monta. Yo desde luego me he quedado con la miel en los labios, con ganas e saber quién fue el que encargó el robo, quién les tendió la trampa y quién se quedó con la joya lucrándose con ella.
ResponderEliminarEn esta historia que nos dejas ocurre lo de siempre; los menos culpables son los que pagan los platos rotos.
Un abrazo. Isan.
Hola, Francisco. Para resolver tus interrogantes habrá que esperar a que Berto salga de la cárcel. Seguro que con su agudo ingenio desvela el misterio. Gracias por pasar por aquí. Un abrazo.
ResponderEliminarCreo estos chinos de verdad son iguales. Ni un pelador de papas se les escapa. Pero ha dejado cabos sueltos apuesto que habra venganza
ResponderEliminarHola, Jose. Desde luego, clama venganza. Ya veremos. Un avrazo.
EliminarMe hs resultado muy fácil de engancharme a tu historia. Bien narrada, sin duda.
ResponderEliminarUn abrazo
Hola, Albada. Gracias por pasar por aquí. Un abrazo.
EliminarUn relato estupendo. Me lo he pasado pipa leyéndolo. Los diálogos son muy realistas, nada artificiosos, y la historia hilarante. Esos dos podrían compararse a Pepe y Otilio, chapuzas a domicilio, ja,ja,ja.
ResponderEliminarMe ha encantado.
Un abrazo y que, por lo menos, tus protagonistas tengan éxito en el concurso, je,je.
Jola, Josep. Me halegro de que hayas tenido esas sensaciones. Gracias por pasar por aquí. Un abrazo.
ResponderEliminar¡Caramba! qué bueno... Me ha despertado varias sonrisas mientras lo leía. Me encanta el tono del narrador, y sobre todo cuando describe al grandote de voz de pito, ja, ja. Qué genial; un relato humorístico hacía falta para este reto.
ResponderEliminarFelicidades, es muy bueno, dinámico, gracioso y original.
Un saludo cordial :)
Hola, Maite. Te agradezco mucho este comentario y que lo hayas visto gracioso y original. Un abrazo.
EliminarHola Isan , muy divertido tu relato y más a la hora de hablar el chino , es muy gracioso , me lo he pasado muy bien leyéndote.
ResponderEliminarTe deseo mucha suerte , besos de flor.
Hla, Flor. Pues si te lo has pasado bien, me doy por satisfecho. Un abrazo.
EliminarHola, Isan. Me estaba imaginando la coletilla para esta divertida historia, de ladrones de medio pelo aunque llevaran peluca, cuando en la última frase del relato vi que te me habías adelantado. Todos los puntos de vista son válidos y pueden ser buenos, pero si tienen un toque de humor totalmente apetecibles. Saludos y suerte
ResponderEliminarHola, JM. Cuando leemos un relato siempre nos imaginamos un final, en este caso hecho coincidido, lo que me alegra. Gracias por pasar por aquí y comentar. Un abrazo.
EliminarHola, Isan: gracias por este viaje a los entretelones de la "alta sociedad" . Un relato entretenido y dinámico. Felicitaciones.
ResponderEliminarHola, Beba. Gracias a ti por leer y comentar. Un abrazo.
EliminarHola 😘 Isan un relato desde la perspectiva de los ladrones muy interesante y bastante curiosa, invita a leerte y saber su final, que por cierto deja con ganas..¿Será ese el chino? Jajaja 😂. Saludos cordiales desde Venezuela. De Perlas narrativas. Raquel Peña.
ResponderEliminarHola, Raquel. Ahí queda la cosa: en que todos los chinos se parecen. Te agradezco el comentario. Un abrazo
EliminarHola Isan que bien cuentas toda la odisea de estos ladronzuelos desde la cárcel.
ResponderEliminarLo he pasado genial leyendo los diálogos que mantienen que dan para hacer una peli.
Muy bueno amigo
Un abrazo
Puri
Hola, Puri. Me alegro de que te haya gustado. Te agradezco que comentes. Un abrazo.
ResponderEliminarHola, Isan!
ResponderEliminarMuy buena propuesta al concurso. Estoy con varios comentarios que he leído en lo del humor y la ironía que rezuma el texto, pero también quiero intuir cierto enfado del ladrón encarcelado. ¡Con las manos vacías y en el trullo!
Y el chino... ¡Qué listo! Desde que aparece en escena me ha dado mala espina. Suerte para el concurso.(Yo no participo esta vez)
Saludos
Hola, José. Tienes razón humor en el relato y enfado en el ladrón poco avispado y engañado. Lo del chino es de libro. Una pena que no hayas participado, así que mi agradecimiento por comentar es más meritorio. Espero leerte en la próxima propuesta. Un abrazo.
EliminarMuy bueno, Isan!
ResponderEliminarMe ha gustado mucho lo bien traído de los diálogos, muy conseguido ese lenguaje típico de los chorizos y del chino. Y vaya con el chino, menudo listillo, se la jugó bien jugada a los simplones de los cacos. Me ha gustado mucho.
Suerte con el concurso.
Un abrazo.
Hola, MJ. Vaya que sí se la jugó, buscó a los paganos perfectos. Me alegro de que te gustara. Gracias por comentar. Un abrazo.
EliminarHola,Isan. Me suele ocurrir en algunas películas y libros que empatizo con ladrones y malhechores, como en tu relato. Estos ladronzuelos chapuceros suelen caer bien al público y tú también lo has conseguido, con gran sentido del humor y una trama que atrapa al lector, has construido un gran relato. Un abrazo y suerte en el Tintero.
ResponderEliminarHola, José. A mí me pasa igual, se les coge cierto aprecio excepto a esos que pintan malos de verdad jajaja. También te deseo a ti suerte. Gracias. Un abrazo.
EliminarHola Isan. Nos has traído un relato que atrapa desde el inicio. Me encantó como has manejado el humor y los regionalismos. Más que desagradar, uno empatiza con los ladrones en su robo fallido.
ResponderEliminarMe encantó.
Suerte en el Tintero.
Abrazo.
Responder
Hola, Cynthia. Los regionalismos y la jerga hay que emplearla en la medida de lo posible para dar más realismo al relato. Suerte también a ti con Zeru Zeru. Un abrazo.
EliminarYo creo que aqui hay menos personajes de lo que psrece. Porque a parete del cocinero y el de la tuends de chinos,me parece que el que pasaba las notas tambien era el mismo chino.
ResponderEliminarMuy buen humor , y todo parece una caricatura , un rue del percebe, en cacos. Con antifaz negro y camiseta pequeña de manga larga a rayas horizontales rojas y blancas.
Me sorprendió bastante lo de narrar en forma de entrevistas, muy originsl.
Saludos y suerte
Hola, Gabiliante. Efectivamente, esa era la idea, eran tres en uno como el aceite multiuso o uno en tres como dios. El caso es que les engañó como a chinos. Suerte también para ti con tus geniales y originales relatos. Un abrazo.
EliminarHola, Isan, me ha divertido mucho tu parodia del robo de una banda de atracadores de “guante blanco”, una historia hilarante de principio a fin. Muy bien hilvanada en esa entrevista para conocer las vicisitudes de lo ocurrido realmente (me recordó a A Sangre Fría por el punto de vista) y con un desenlace acorde con la ineptitud de los protagonistas.
ResponderEliminarMuy buen relato. Un abrazo.
Hola, Carles. Ya lo creo, de guante blanco. Me alegro de que te haya parecido divertido. Un abrazo.
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