COMENTARIOS AL RELATO PRESENTADO EN «EL TINTERO DE ORO» PARA 3/2022 DE ACUERDO CON LAS PREMISAS DEL CARTEL:
EL RELATO SE PUEDE LEER PINCHANDO AQUÍ.
Aquí encontrarás comentarios sobre la actualidad y lo que no es tan actual, lo que tiene cierto interés o lo que ha despertado la curiosidad del autor, algunos relatos y fotos propios y artículos de prensa. Todo sin más pretensión que la de darle salida pública.
A eso se le llama una Reunión de portal exprés. Muy bueno. Un saludo.
ResponderEliminarGracias, Ainhoa por pasar por aquí. Un abrazo.
EliminarEsto es lo que se llama, una comunidad de vecinos bien avenidas. todos de acuerdo y sin reunión de por medio. Que dan una pereza...
ResponderEliminarDivertida lectura.
Un abrazo.
Hola, Francisco. Si hay unanimidad para qué formalidades. Se acuerda y listo. Gracias por comentar. Un abrazo.
EliminarUna comunidad de vecinos muy particular, jeje. Estupendo micro, Isan.
ResponderEliminarGracias, Marta. Un abrazo.
EliminarEsos vecinos están muy bien organizados... muy bueno y divertido, saludos.
ResponderEliminarHola, Ana, Bien organizados, sí, y es difícil que esto ocurra en las comunidades de vecinos tan propensas a la trifulca. Un abrazo.
EliminarDivertido relato! Las comunidades de vecinos también dan para escribir...Felicidades, Isan!
ResponderEliminarHola, Mayte. Me alegro de que te parezca divertido. De eso se trataba. Un abrazo.
Eliminar¡Hola, Isán! Ja, ja, ja... Me vino aquella frase de "Entre todos lo mataron y el solito se murió". Un micro de humor negro delicioso, he visualizado la escena en una comedia teatral y creo que este micro sería un excelente punto de partida. Buenísimo cómo partiendo del hallazgo has conseguido esbozar todas las historias de cada vecino. Un abrazo!
ResponderEliminarHola, David. Me alegra que lo hayas visto así. La verdad que con 250 palabras hay que ajustar mucho para dar una idea de lo que se pretende. Muy oportuno lo de entre todos lo mataron y el solo se murió. Gracias por comentar. Un abrazo y gracias.
EliminarHola Isan muy buen micro me a gustado mucho la verdad es que yo creo que en todas las comunidades se hacen reuniones de esta clase alguna vez , besos de flor.
ResponderEliminarVaya Isan, yo me lo pensaría dos veces en seguir viviendo ahí. A partir de este fatídico encuentro en el ascensor lo mismo no hay quien viva en esa comunidad. Eso sí, dará que hablar, y mucho. Se destaparan los secretos más íntimos jeje. Un abrazote.
ResponderEliminarHola, Eme. Ellos viven felices, quizás los del cuarto cuando descubran el fiambre se incomoden un poco. Veremos. Gracias por comentar. Un abrazo.
EliminarLaurean es un buen administrador. Genara deberia ser despedida por no hacer caso
ResponderEliminarJajaja, despedida como mínimo, por no acatar órdenes y por descubrir el "pastel". Un abrazo.
EliminarMuy divertida tu aportación. Buen micro.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias, Macondo. Un abrazo.
EliminarUn lio estupendo. Me encantó el barullo, y que en dos años no lo usasen :-)
ResponderEliminarUn abrazo
Gracias, Patricia. Un abrazo.
EliminarVaya con Laureano y Nicasia, lo tenían todo bien atado, je, je. Genial relato de personajes, y eso que te has valido de muy poco espacio para presentarlos. La escena es variopinta, se palpa el desconcierto y la complicidad de dos mentes maquiavélicas al mando de todo.
ResponderEliminarMuy bueno, Isan. Me encantó.
Un abrazo!
Hola, Pepe. Lo cierto es que no pensaba que podría condensar la idea en tan poco espacio, pero a base de pulir y eliminar se consiguió. Te agradezco el comentario. Un abrazo.
EliminarMuy buena reunión de consorcio, los vecinos de acuerdo, muy bueno tu relato, en parte divertido pues debe ser de las pocas veces que todos están de acuerdo, me gustó mucho. PATRICIA F.
ResponderEliminarHola, Patricia. Efectivamente, encontrar la unanimidad en una comunidad de vecinos es un milagro. Me alegro de que te haya gustado. Un abrazo.
EliminarHola, Isan. Me ha gustado mucho el micro , tiene un aire a Berlanga esta comunidad tan particular que has creado. Muy original.
ResponderEliminarSaludos.
Hola, Pedro. La originalidad es difícil, así que, si la ves, me quedo satisfecho. Gracias por pasar. Un abrazo.
EliminarJa, ja. No hay crimen que no termine por descubrirse. Muy buen relato en el que, entre el propio asesinato y las ganas de encubrirlo, hay mucho involucrado. Y además muy bien contado.
ResponderEliminarUn beso.
Hola, Rosa. Ya lo creo. Si no que se lo digan a Sam Spade (el del Halcón Maltés del próximo mes que estoy leyendo). Pero como tarden mucho en descubrir el autor/a no les van a pillar vivos, más que todo por la provecta edad de todos. Gracias por comentar. Un abrazo.
EliminarCuidado con esos vecinos, tan dispuestos a encubrir.
ResponderEliminarBien contado.
Saludos.
Hola, muchas gracias por pasarte por aquí. Un abrazo.
EliminarEntre Amancio, Genara y Nicasia nos has envuelto en un galimatías para distraernos de su unánime corrupción. Muy buen relato, original y con el embrollo inherente a toda comunidad de vecinos que se precie. Me ha gustado.
ResponderEliminarHola, Matilde. El lio es inherente a las comunidades de vecinos y lo raro es encontrar esta unanimidad en esta. Algo habrá que esconder. Un abrazo.
Eliminar¡Vaya con los vecinitos de marras! Los nombres del santoral muy apropiados, de aquella costumbre de antaño, creo, de poner el nombre del santo del día del nacimiento de la pobre criatura, tengo un tío abuelo llamado Teófilo-Casimiro. Bueno, por lo menos no son chivatos y guardan los secretillos aunque huelan mal.
ResponderEliminarMenos mal que no tengo ascensor.
Un abrazo, Isan.
Hola, Isabel. Por los nombres conoceréis su edad, se podría decir. Antes se miraba el santoral y ahora la originalidad y el foráneo como Kevinkosner. Espero que tus días de relax hayan cundido. A ves si vemos tu micro del mes. Un abrazo.
EliminarMuy bueno Isan, los nombres de los vecinos a cada cual mas original, y la historia se las trae, menuda panda entre todos arreglaron el asunto del cadáver echando tierra encima.
ResponderEliminarUn abrazo
Puri
ola, Puri. Bueno, mucha tierra no es que echaran, ni se molestaron. Con clausurar el ascensor se dieron por satisfechos en el convencimiento de que ninguno podría levantar la liebre. Grancias por comentar. Un saludo.
EliminarVaya, Isan. Ojalá hiciéramis así de rápido las juntas de comunidad. Je, je, je.
ResponderEliminarUn relato muy divertido. Y una comunidad digna del director Alex de la Iglesia.
Un saludo.
Hola, Bruno, gracias por comentar. Un abrazo.
EliminarHola Isan. Me encantó el relato. Muy divertida la reunión de vecinos y pobre del difunto que no tuvo quién lo llorara. Un abrazo 🐾
ResponderEliminarHola, Rosa, Parece que el difunto no gozaba del aprecio del vecindario. Gracias. por comentar. Un abrazo
EliminarAquí no hay quien viva, se me ha venido a la cabeza. Vaya tela con los nombrecitos de los vecinos, se nota que ya tienen sus años. Nada mejor para romper la monotonía diaria que encontrarse un antiguo muerto en el ascensor. Muy divertido, Isan. Un abrazo.
ResponderEliminarHola, Jorge, Me alegro de que te haya parecido divertido. Gracias. Un abrazo.
EliminarHola, Isan.
ResponderEliminarNo he podido por menos que evocar cierta serie de televisión al leer tu microrrelato. Me ha gustado mucho la frescura y el lenguaje directo que has utilizado para narrar una historia de la que nadie parecía querer hacerse cargo. ¡Me ha gustado mucho! Un abrazo desde la Buhardilla de Tristán.
Hola, Javier. Conozco una serie de TV sobre vecindario pero no la he visto, no soy mucho de tele. Me alegro de que te gustara el lenguaje. Muchas gracias por comentar. Un abrazo.
EliminarUn relato divertido que nos muestra una relación de vecinos muy particular, ja, ja.
ResponderEliminarBuen relato.
Un saludo.
Hola, Cynthia. Gracias por pasar por aquí. Un abrazo.
EliminarHola, Isan. Flor de conspiración! Además, muy divertida!
ResponderEliminarUn abrazo
Hola, Mirna. Me alegro de que te haya parecido divertida. Un abrazo
EliminarUna vecina frente al ascensor del vecindario.
ResponderEliminarMi saludo te dejo.
Gracias, Guillermo. Un saludo.
EliminarHola, Isan, juraría que había dejado un comentario, en fin.
ResponderEliminarTe ha quedado un micro perfecto y creo que yo viví en una comunidad así, entre los que no bajaban a las reuniones y los que pasaban de todo... no me extrañaría que hubiese algún muerto en el cuarto de los contadores.
Un saludo, que pases un buen día.
Hola, Angel. Efectivamente has dejado un comentario en la otra sección de este blog.
EliminarPues visto cómo se las gastan estos vecinos no me extrañaría, como dices, lo del cuadro de contadores. Gracias por pasar por aquí. Un abrazo.
Caray, salieron todos los trapos sucios de golpe y de golpe también quedaron resueltos y conformes. Muy bien traído.
ResponderEliminarUn saludo.
Claro, para qué iban a andarse con remilgos si todos estaban de acuerdo. Un abrazo.
ResponderEliminarHola Isan ahora la pregunta ¿Quién lo mató? Allí todos ❤️ con su cadáver en el ascensor, siendo cómplices. Gracias por visitarme, aquí devolviendo tu cortesía.
ResponderEliminarMe temo que va a ser difícil averiguar al autor material del crimen porque, como en Fuenteovejuna, todos a una. Gracias por comentar. Un abrazo.
EliminarHola, Isan. Buen laberinto donde puede haber de todo y nunca se sabe quien puede ser el culpable en estos enredos. El tono de humor negro está logrado y le da más morbo al asunto. 😁🖐🏼
ResponderEliminarHola, En estos casos se puede acusar a cualquiera y se acierta. Gracias por tu comentario. Un abrazo.
ResponderEliminar